martes, 1 de junio de 2021

EL LEVANTAMIENTO DE SANTANDER EN 1808

 [La siguiente transcripción está tomada de la siguiente fuente: Archivo Histórico Provincial de Cantabria]

“Nobles esforzados, y amados compañeros: Por la circular de 27 de mayo próximo habréis visto las conseqüencias del memorable suceso de la noche anterior.”
La frase hace referencia a la noche del 26 de mayo de 1808, cuando la ciudad de Santander se levanta frente a la invasión francesa iniciada semanas antes. La reacción de Santander, y de Cantabria en general, aunque era ya en esta época Santander la capital indiscutible de la provincia, no deja de ser bastante tardía. El levantamiento del 2 de mayo y las abdicaciones de Bayona encendieron los ánimos de la población y los levantamientos se suceden en los días siguientes por todo el país. Aparentemente Santander queda un poco a la expectativa de los acontecimientos y adquieren una actitud bastante conservadora y prudente. Finalmente, las autoridades civiles y religiosas son las que parecen tomar la iniciativa y seguramente en los días previos al levantamiento ya existieran conversaciones para la administración de Cantabria al margen del gobierno invasor. Se forma entonces una Junta Suprema de Cantabria, cuya presidencia ofrecen al obispo de la diócesis de Santander, Rafael Tomás Menéndez de Luarca, quien a partir de entonces ostentará el título de regente de Cantabria con el tratamiento de Alteza. Esta junta, similar a las organizadas en otras partes del país y que enviará representantes para la formación de una Junta Suprema General, será la encargada de la administración y defensa de Cantabria en los años de ocupación francesa. El documento que os presentamos es la circular que se envió a todas las jurisdicciones de Cantabria para que acudan a una junta general a celebrar en el Palacio Episcopal. En ella se hace referencia al levantamiento en el Principado de Asturias y en general en todas partes de España y empieza a organizarse la defensa de la provincia mediante el llamamiento a las armas, que cristalizará en la formación de un pequeño ejército conocido como “Armamento Cántabro”. La victoria cae sin embargo del lado francés que llega a Santander encontrando poca resistencia y en menos de un mes desde el levantamiento la Junta Suprema de Cantabria tiene que capitular ante el general francés Merlé y sus miembros se exilian a Liébana. Al final del documento vienen los nombres de quienes convocan esta primera junta, entre ellos figura el obispo, que como hemos dicho será el encargado de presidirla, el alcalde Santander Julián Bringas además de otros notables de la capital, como Francisco de la Pedraja o el Conde de Campogiro, militares como Vicente Camino o José Antonio de Terán etc. Destaca aún la poca presencia de personalidades de otras partes de Cantabria, así como la ausencia del Gobernador Político y Militar Tomás O´Donoju. Para completar un poco los acontecimientos siguientes de esta junta y contextualizar con otros documentos los acontecimientos de aquellos días os damos dos enlaces, uno a un documento conservado en el Archivo Histórico Nacional en el que la Junta Suprema de Cantabria pide representación en la Junta General y otro titulado “Exposición de los hechos y maquinaciones que han preparado la usurpación de la corona de España y los medios que el Emperador ha puesto en obra para realizarla” escrito por Pedro de Ceballos, precisamente uno de los representantes de Cantabria en la Junta General y posteriormente ministro durante el reinado de Fernando VII. 

 Fuente: Sautuola 63-13





No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...